La Menopausia, en una nueva mirada
Las mujeres se han vuelto más jóvenes pero con más años. La expectativa de vida nos ha dejado con la mitad de nuestra existencia activa en menopausia, luchando con limitaciones físicas, cuando, por no ser por el cese ovulatorio, podríamos vivirla con un estado de salud integral y un bienestar general por más tiempo.
Visto así, la menopausia limita nuestra vida y sigue teniendo mala prensa en relación a sus efectos secundarios, pero…
¿Qué sentirían si les dijera que se está trabajando científicamente para retrasar el envejecimiento de las mujeres en relación a la biología ovárica? Si, así como lo leen.
La Doctora en Harvard y CEO de una empresa biofarmacéutica, Daisy Robinton estudia cómo extender la ovulación. Se apoya en la biología ovárica que puede combatir la infertilidad, las afecciones crónicas y mejorar el deseo sexual.
Ella es cofundadora y directora ejecutiva de Oviva, y recientemente habló en Universidad de California sobre la ambición de su empresa de retrasar el envejecimiento de las mujeres al extender la ovulación. Busca innovar en el campo del fin del ciclo reproductivo, cambiar el relato de la longevidad reproductiva femenina. Además, es tratado dicho tema, como una de las causas más transversales de la desigualdad entre la naturaleza del hombre y la mujer.
Robinton enfatiza que: “los ovarios envejecen cinco veces más rápido que otros órganos, lo que resulta en infertilidad, menopausia temprana y más años de mala salud para las mujeres. Queremos cambiar la narrativa de la longevidad reproductiva femenina y abordar las causas profundas de la desigualdad de sexo/género en nuestra sociedad”. “Tenemos que cambiar el relato de la longevidad reproductiva femenina”.
La longevidad, menopausia, endometriosis, aunque puedan parecer algo desconectados, tienen en común lo mismo. Todas las investigaciones nos llevan al tema central: el ovario, el cual no solo se estudia como un órgano reproductivo, sino que están explorando su papel como un centro de comando hormonal, que puede afectar en todo el cuerpo de una mujer.
Queremos cambiar la narrativa de la longevidad reproductiva femenina y abordar las causas profundas de la desigualdad de sexo/género en nuestra sociedad.Daisy Robinton, Doctora en Hardvard.
Por Daniela Rago
8 de julio de 2022
Las mujeres se han vuelto más jóvenes pero con más años. La expectativa de vida nos ha dejado con la mitad de nuestra existencia activa en menopausia, luchando con limitaciones físicas, cuando, por no ser por el cese ovulatorio, podríamos vivirla con un estado de salud integral y un bienestar general por más tiempo.
Visto así, la menopausia limita nuestra vida y sigue teniendo mala prensa en relación a sus efectos secundarios, pero…
¿Qué sentirían si les dijera que se está trabajando científicamente para retrasar el envejecimiento de las mujeres en relación a la biología ovárica? Si, así como lo leen.
La Doctora en Harvard y CEO de una empresa biofarmacéutica, Daisy Robinton estudia cómo extender la ovulación. Se apoya en la biología ovárica que puede combatir la infertilidad, las afecciones crónicas y mejorar el deseo sexual.
Ella es cofundadora y directora ejecutiva de Oviva, y recientemente habló en Universidad de California sobre la ambición de su empresa de retrasar el envejecimiento de las mujeres al extender la ovulación. Busca innovar en el campo del fin del ciclo reproductivo, cambiar el relato de la longevidad reproductiva femenina. Además, es tratado dicho tema, como una de las causas más transversales de la desigualdad entre la naturaleza del hombre y la mujer.
Robinton enfatiza que: “los ovarios envejecen cinco veces más rápido que otros órganos, lo que resulta en infertilidad, menopausia temprana y más años de mala salud para las mujeres. Queremos cambiar la narrativa de la longevidad reproductiva femenina y abordar las causas profundas de la desigualdad de sexo/género en nuestra sociedad”. “Tenemos que cambiar el relato de la longevidad reproductiva femenina”.
La longevidad, menopausia, endometriosis, aunque puedan parecer algo desconectados, tienen en común lo mismo. Todas las investigaciones nos llevan al tema central: el ovario, el cual no solo se estudia como un órgano reproductivo, sino que están explorando su papel como un centro de comando hormonal, que puede afectar en todo el cuerpo de una mujer.
Queremos cambiar la narrativa de la longevidad reproductiva femenina y abordar las causas profundas de la desigualdad de sexo/género en nuestra sociedad.
Daisy Robinton, Doctora en Hardvard.
Inevitablemente todas las mujeres, antes o después, pasarán por la menopausia. Solo en los EE.UU., más de 2.000.000 de mujeres entran en la menopausia cada año. Robinton, explica: “La menopausia está al acecho en el futuro de cada mujer joven, esperando robar nuestro potencial”.
Para OVIVA la menopausia es una limitante de salud que implica deterioro muscular, afecciones psicológicas, complicaciones en las relaciones sexuales, riesgos cardíacos y debilidad ósea, por eso su función y objetivo es atacar su aparición, para postergarla en el tiempo, en sintonía con la vida activa de hoy.
Se intenta así, ayudar a promover un cambio para que las mujeres tengan más oportunidad de vivir una vida más plena y por más tiempo, saludables, vibrantes, felices sin importar la edad.
Y ahora viene la buena noticia: los científicos están desarrollando terapias, para posponer la menopausia, abordar la infertilidad y resolver afecciones crónicas como el síndrome de ovario poliquístico o la endometriosis aprovechando la biología ovárica de diferentes maneras.
En el 2020, a un investigador que trabajaba en un tratamiento de COVID-19 se le sugirió que lo estudiara solo en hámsteres machos, porque los ciclos hormonales de las hembras provocarían que los datos fueran demasiado confusos. Mientras que la investigación médica todavía favorece en gran medida los cuerpos masculinos, las mujeres deben luchar contra dolencias debilitantes con tratamientos inadecuados, descubrimiento así el marcado abismo en la investigación y la inversión en salud de la mujer. Ahora bien, Oviva Therapeutics tiene como objetivo extender la vida útil de la salud en las mujeres mediante el desarrollo de terapias novedosas que se enfocan en la función ovárica y la longevidad.
“Históricamente, en la práctica de la medicina para mujeres, existe la aceptación de que cierto grado de sufrimiento es simplemente normal y no hay ningún esfuerzo por aliviarlo”, sostiene.
Por suerte para nosotras, su primer objetivo es la menopausia. El final del ciclo menstrual de una mujer es un gran evento fisiológico y vital que el sistema médico generalmente trata como una especie de contratiempo. Es sabido que sus síntomas afectan a la gran mayoría de las mujeres, perturbando en diversos grados su sueño, salud mental, cognición y función sexual, a veces durante varios años. También marca “el punto de inflexión de la relativa juventud y la forma física al declive gerontológico de la vejez”. Después del último ciclo de una mujer, aumentan los riesgos de enfermedad cardíaca, fragilidad ósea, y otros trastornos, pero no está del todo claro qué papel juega la menopausia en esos riesgos.
Muchas mujeres llegan a los 50 y el sexo pasa a ser doloroso o no lo desean, no se sienten bien, no pueden dormir, ¿y lo aceptamos como un hecho durante la mitad de sus vidas?
Cuando Robinton profundizó en la investigación sobre la menopausia hace unos años, manifestó haberse sorprendido: “Muchas mujeres llegan a los 50 y el sexo pasa a ser doloroso o no lo desean, no se sienten bien, no pueden dormir, ¿y lo aceptamos como un hecho durante la mitad de sus vidas?”. Para ella, la menopausia está al acecho en el futuro de cada mujer joven, esperando robar su potencial. Pero ella no está contenta con dejar que siga siendo así
Y finalmente, en algún momento de los 50, nuestros ovarios pasan a la vejez, incluso cuando el resto de nuestro cuerpo permanece más joven, y para muchas de nosotras, nuestra salud y calidad de vida comienzan a deteriorarse a partir de ahí”.
Entonces, como bien dice nuestra científica “Reconociendo los problemas que ocurren en presencia de la menopausia, era hora de preguntarse qué pasaría en ausencia de ella – Si pudiera encontrar la clave bioquímica correcta para desbloquear la línea de tiempo natural de los ovarios sería la llave maestra”
Por eso, no podemos detener el tiempo, ni detener el envejecimiento, además me preguntaría para qué. Lo importante es que en este trayecto, los nuevos trabajos científicos nos lleven por este camino de la mejor manera posible, sin dolores ni sufrimientos. Sin marcas de declive. Pensar el envejecimiento en términos de duración de la salud y no en duración en años y mucho menos en una juventud eterna.